jueves, 28 de mayo de 2009

CPI VUELVE A LAS ANDADAS

Hoy se publica una encuesta de CPI uno de cuyos rubros es la aprobación de la gestión de los congresistas.

El caso más insólito para no llamarlo amañado es el de la congresista Martha Hildebrandt que figura en séptimo lugar con un nivel de aprobación del 46.7%. Ud sabe cual ha sido la gestión de la congresista Martha Hildebrandt? Yo tampoco. Aparte de dormir durante las sesiones y de aparecer en el programa de Carlos Álvarez por canal 2, nadie, ni ella sabe cual es su labor en el congreso, sin embargo casi la mitad de los peruanos entrevistados aprueba su gestión.

En el puesto octavo aparece la congresista Gabriela Pérez del Solar que ni siquiera aparece en el programa de Carlos Álvarez y que si hubiera sido por que ha dado a luz a un robusto niño, ni siquiera sabríamos que fue elegida al congreso.

A continuación y con 45% de aprobación a su gestión de congresista figura Alberto Andrade Carmona. Recuerda usted algún proyecto de ley presentado por Andrade en los últimos cincuenta años? Puede alguno de los 45 de cada 100 peruanos que aprueba su gestión parlamentaria, mencionar alguna moción propuesta por el ex alcalde de Lima? Alguna intervención, pedido, interpelación, o siquiera votación de Andrade Carmona?

Décimo tercero con 42% de aprobación a su desempeño como padre de la patria, encontramos a Payasito Waisman que ni siquiera ha hablado en el congreso y por lo tanto nadie puede votar aprobando la mudez de un parlamentario.
Waisman otrora célebre por sus disparates, de un momento a otro ha entrado en estado de catatonia, piensa pero no existe y sin embargo para Manuel Saavedra 42% de los encuestados están celebrando la labor legislativa de payasito.

Sabe muy bien el señor Saavedra por que es un experto en cocinar encuestas, que lo que ha querido decir el público encuestado, en donde su engreída Keiko figura cuarta, es cuanto conoce a determinado congresista y no si aprueba gestiones que en muchos casos no existen.
Eso debe decirlo Saavedra y no permitir la confusión que en buena cuenta termina siendo un engaño.

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